martes, 6 de noviembre de 2007

sillón de segunda mano

Hace un tiempo que no hablo con mi hermana mayor y dudo mucho que eso vaya a cambiar porque no quiero contacto con ella. Eso me ha costado mucha pena, pero ya está más que asumido.

Soñé que estaba con ella subido en un coche deportivo descapotable negro. Ella conducía y yo estaba en el asiento del copiloto. Bajábamos la calle Jacometrezo para desviarnos a la Gran Vía. Era una tarde hermosa y me encontraba bien, aunque un poco extrañado. Tuve la necesidad de saber la hora y apunté con mi teléfono móvil al edificio de enfrente y, como si de un mando a distancia se tratara, en el edificio amarillo apareció un reloj digital que marcaba las 17.40

Mi hermana giró muy bruscamente para incorporarse a la Gran Vía y casi perdemos el sillón rojo de Miguel -en el que pasa su consulta- que estaba encajado en la parte trasera del coche. Hábilmente, lo atrapé con una mano y seguimos bajando la calle que parecía mucho mayor y más cosmopolita.

Pude ver un travesti de color con pelucón dorado que trabajaba en una cadena de restaurantes caminando con mucho desparpajo y dirigiéndose a nosotros. Sin embargo no recuerdo nada más.

2 comentarios:

Ababol dijo...

Supongo que es muy importante para ti ese sillón rojo, José. Afortunadamente conseguiste atraparlo.
Muy acertada tu interpretación de mis sueños.
Un beso inmenso.

Anónimo dijo...

¿Con pelucón dorado?
Con razón decían en las noticias el otro día que ya se veía la navidad por la Gran vía....mira tu por donde...

Marita