viernes, 27 de junio de 2008

el animal completado

No, fue mi energía fluir lo que sentí. Libre, se desenreda y se expande. Ahora lo ocupa todo. Solo es un momento. En el que unas palabras pronunciadas con temor se convierten en energía vital.

"Sí, me desenvuelvo solo"

El animal que soy se completa cuando dejo los pensamientos de mi mente de lado. Esas hipotecas que arrastro para enredarme en el camino, afirmandome justo en lo que no soy. No soy incapaz. Todo lo contrario, me siento lleno de potencialidades.

Me gustaría conocer a Antoni y tomarme un coñá con él, contemplando en silencio el trajín de los barcos en el puerto de Génova.

Me siento en paz.